Uno de los alimentos más populares de la dieta mediterránea es el aceite de oliva virgen extra o AOVE. Este aceite no sólo es bueno para la salud física, sino que también tiene diversos beneficios para la salud mental, como el alivio del estrés y la ansiedad. En este artículo, hablaremos del impacto del aceite de oliva en la salud mental, y de cómo puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.
¿En qué es bueno el aceite de oliva para tu salud?
El aceite de oliva es increíblemente saludable, y contiene nutrientes esenciales, como grasas monoinsaturadas, antioxidantes y ácidos grasos Omega-3. Estos nutrientes han demostrado mejorar la salud del corazón, reducir el colesterol e incluso disminuir el riesgo de enfermedades crónicas. El aceite de oliva también puede ayudar a estabilizar los niveles de azúcar en sangre, mejorar la digestión y reducir la inflamación del organismo.
El aceite de oliva también contiene un compuesto llamado oleocantal, que tiene propiedades antiinflamatorias y puede reducir la inflamación del organismo. Del mismo modo, se ha demostrado que la oleuropeína, un compuesto presente en el aceite de oliva, mejora la función cognitiva y protege contra la disminución de la función cerebral relacionada con la edad y las enfermedades.
Impacto del aceite de oliva en la salud mental
Se ha documentado ampliamente los beneficios del aceite de oliva para la salud física, pero también se ha demostrado que tiene efectos positivos sobre la salud mental. Muchos estudios han demostrado que la dieta mediterránea, rica en aceite de oliva, puede proteger frente a un buen número de trastornos de salud mental e, incluso, ayudar a mejorarlos.
La investigación ha demostrado que el aceite de oliva puede ser especialmente eficaz para reducir el riesgo de desarrollar depresión, estrés y ansiedad. Un estudio de 2019 encontró que los adultos que consumían 400 mililitros de AOVE por semana tenían la mitad de riesgo de padecer depresión, en comparación con los que no consumían aceite de oliva. Del mismo modo, otro estudio de 2014 encontró que un mayor consumo de aceite de oliva se asociaba a un menor riesgo de todo tipo de trastornos de salud mental, incluyendo ansiedad, depresión y estrés.
El aceite de oliva también tiene propiedades antiinflamatorias, y la investigación ha demostrado que la inflamación en el cuerpo puede estar relacionada con la ansiedad y la depresión. Un estudio realizado en 2013 encontró que una dieta rica en AOVE puede reducir la inflamación en el organismo, y esto puede tener un impacto positivo en la salud mental.
Además, los nutrientes que se encuentran en el aceite de oliva pueden ayudar a mejorar la función cerebral, y la investigación ha demostrado que los ácidos grasos Omega-3 del aceite de oliva pueden tener un impacto positivo en la función cognitiva. Un estudio de 2007 encontró que los adultos que consumían más ácidos grasos Omega-3 tenían una mejor función cognitiva, y esto a su vez puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.
Consejos para consumir aceite de oliva
Para obtener el máximo de beneficios del aceite de oliva, es importante elegir aceite de oliva virgen extra, ya que contiene la mayor cantidad de nutrientes. Cuando consuma aceite de oliva, también es mejor utilizarlo como aliño de ensaladas, en lugar de cocinar con él, ya que calentar el aceite puede dañar algunos de los nutrientes.
Del mismo modo, es importante buscar un aceite de buena calidad, ya que algunas marcas más baratas pueden contener sabores artificiales y otros aditivos que pueden afectar a los beneficios para la salud del aceite. Busque un aceite de oliva virgen extra ecológico, ya que contendrá la mayor cantidad de nutrientes y estará libre de productos químicos.
El aceite de oliva tiene numerosos beneficios para la salud, y las investigaciones han demostrado que puede tener un impacto positivo en la salud mental. El aceite de oliva es especialmente beneficioso para reducir el riesgo de desarrollar ansiedad, depresión y estrés, así como para mejorar la función cognitiva. Para obtener el máximo de beneficios, es importante elegir aceite de oliva virgen extra y buscar una marca de buena calidad. Incluir el aceite de oliva como parte de una dieta sana puede ser una gran manera de mejorar la salud general, incluyendo la salud mental.
En conjunto, se puede concluir que el aceite de oliva virgen extra es un gran complemento para cualquier dieta, y puede tener numerosos beneficios para la salud física y mental. Se ha demostrado que sus propiedades antiinflamatorias, así como los nutrientes que contiene, tienen un impacto positivo sobre la ansiedad y la depresión, y consumir una cantidad sana de AOVE puede ser beneficioso para la salud mental en general.